Los motivos ornamentales del faldón están compuestos por una orla y cuatro broches. En la orla predominan los motivos ornamentales vegetales y animales. Con el ave, hablamos de la alegoría del pájaro que come del fruto de los espinos anunciando el martirio de Cristo. La mariposa es sinónimo de la transformación y resurrección del Señor en el cristianismo. El ancla alude a la advocación de la Nuestra Señora de la Esperanza y el lazo recoge un fragmento del himno más antiguo que se conoce de la Virgen María, el Sub tuum praesidium. En el que podemos leer: Sub tuum praesidium confugimus (Bajo tu protección nos acogemos) / Virgo gloriosa et benedicta (¡Oh Virgen Gloriosa y Bendita!). Que nos evoca a la antigua Titular de la Hermandad, la Virgen del Amparo. Si vemos la pintura central, podemos apreciar en el centro a Santa Ana enseñando a leer a la Virgen, inspirada en una obra de Murillo, relacionando este óleo con los cuatrocientos años del nacimiento del prolífico pintor, así como el nombre de la ermita de Santa Ana, sede canónica de la Cofradía. En el fondo, podemos ver a la izquierda una vista nocturna del pueblo que nos quiere recordar a la madrugada del Viernes Santo, cuando el Señor de Constantina sale a las calles. A la derecha, vemos la Ermita de Santa Ana por la mañana, como en la mañana de Viernes Santo sale María Santísima de la Esperanza al tradicional encuentro con su Hijo.
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